domingo, 9 de agosto de 2015

De vez en cuando la vida - Joan Manuel Serrat

De vez en cuando la vida
Nos besa en la boca
Y a colores se despliega
Como un atlas,
Nos pasea por las calles
En volandas
Y nos sentimos en buenas manos;
Se hace de nuestra medida,
Toma nuestro paso
Y saca un conejo de la vieja chistera
Y uno es feliz como un niño
Cuando sale de la escuela.

De vez en cuando la vida
Toma conmigo café
Y está tan bonita que
Da gusto verla.
Se suelta el pelo y me invita
A salir con ella a escena.

De vez en cuando la vida
Se nos brinda en cueros
Y nos regala un sueño
Tan escurridizo
Que hay que andarlo de puntillas
Por no romper el hechizo.

De vez en cuando la vida
Afina con el pincel
Se nos eriza la piel
Y faltan palabras
Para nombrar lo que ofrece
A los que saben usarla.

De vez en cuando la vida
Nos gasta una broma
Y nos despertamos
Sin saber qué pasa,
Chupando un palo sentados
Sobre una calabaza.


De vez en cuando, cada tanto, existen momentos o instancias que irrumpen inesperadamente desmantelando el cuidadoso escenario que construimos con nuestras ilusiones. No hay manera de jugar, predecir o anticipar nuestros encuentros y desencuentros con la vida, sino con las ficciones de algún deseo puesto en la piel de la realidad más ''objetiva'' que mientras dura... es para siempre.
Para siempre tendremos a las personas que queremos de nuestro lado, para siempre seremos capaces de disfrutar lo que nos gusta... De acá en adelante, aseguramos y juramos no volver a cometer los mismos errores, no volver a caer en semejante desgracias...
Más abismal será el desencanto, cuanto más certeza de invulnerabilidad se haya soñado, cuanto más seguro estén los planos para construir la felicidad. 
Pero si no pudiéramos evitar ''creérnosla'' de vez en cuando, tampoco podríamos disfrutar de aquellas fortunas que surgen, irrumpen y sorprenden... aún de paso, aún efímero, y nos acompaña el entusiasmo de un amanecer sin sombras.

Everness


Sólo una cosa no hay. Es el olvido
Dios que salva el metal salva escoria
y cifra en Su profética memoria
las lunas que serán y las que han sido.

Ya todo esta. Los miles de reflejos
que entre los dos crepúsculos del día
tu rostro fue dejando en los espejos
y los que ira dejando todavía.

y todo es una parte del diverso
cristal de esa memoria, el universo;
no tienen fin sus arduos corredores

y las puertas se cierra tu paso;
sólo del otro lado del ocaso
verás los Arquetipos y Esplendores.

                                                                                                           Jorge Luis Borges